Antes las declaraciones de Carmen Fructuoso en relación a que “Ahora presentamos este borrador que recoge sugerencias de distintos sectores como la FROET o las asociaciones de discapacidad», la organización recuerda que lleva casi dos años solicitando mejoras necesarias del servicio, que han sido completamente ignoradas
La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red, CONSUMUR, tras conocer el comunicado de prensa del Ayuntamiento de Murcia en el que se informa de la presentación del borrador de la nueva ordenanza del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en vías públicas de Murcia, manifiesta su rechazo al mismo, al considerar que las modificaciones a la normativa no sólo no dan respuesta a las actuales necesidades de los usuarios, sino que generarán más problemas de estacionamiento.
La Concejala de Movilidad Sostenible y Limpieza Viaria del Ayuntamiento de Murcia, Carmen Fructuoso, ha declarado que «esta normativa se adapta a las necesidades que en la actualidad la sociedad demanda para alcanzar una movilidad más sostenible en las ciudades, contribuyendo a disminuir el uso del vehículo privado en las mismas y fomentando el uso del transporte público colectivo u otros vehículos de movilidad personal ecológicos, de forma que incida en la mejora del medio ambiente».
CONSUMUR entiende que para disminuir el uso del vehículo privado, como así se pretende con la limitación del tiempo de estacionamiento, el municipio debe haber sido previamente preparado, contando con un mayor número de aparcamientos disuasorios en todo el perímetro de la ciudad, además de contar con autobuses lanzaderas de continua frecuencia, entre otras medidas. Por otro lado, si se pretende contribuir a una mejora del medio ambiente, una limitación mayor del tiempo de estacionamiento provocará más rotación de vehículos y, por tanto, mayor contaminación.
Por otro lado, Fructuoso indica que esta propuesta “recoge sugerencias de distintos sectores como la FROET o las asociaciones de discapacidad». CONSUMUR considera que al parecer el Ayuntamiento ha tomado en consideración únicamente las voces de algunas organizaciones muy concretas como éstas, dado que CONSUMUR, como organización que representa a los consumidores y usuarios, destinatarios finales del servicio, no ha sido tenida en cuenta como a otras organizaciones representativas de los intereses socio-económicos.
En este sentido, el pasado mes de noviembre, la organización manifestó públicamente su malestar ante la pasividad del Ayuntamiento. Y es que, en enero de 2021, CONSUMUR ya trasladó al Consistorio las principales quejas que la organización venía recibiendo, reiterando las mismas en varias ocasiones, incluso directamente en una reunión mantenida con la responsable de la Concejalía, así como haciéndole propuestas que fueron rechazadas todas en su totalidad.
Para la organización es inadmisible que, tras prácticamente dos años, no se hayan tenido en cuenta ni una sola de las peticiones, a pesar de que se procedió a la modernización de los parquímetros, que por otro lado, no están cumpliendo la función de estar al servicio del ciudadano.
En ese momento, el Ayuntamiento anunció nuevas funcionalidades, como la instalación de monederos electrónicos, asociados a la matrícula del vehículo y que permitirían al usuario acumular un saldo virtual cuando el tiempo del aparcamiento no se agota. Esta fue una de las principales peticiones de CONSUMUR, pero sin embargo, a día de hoy, esa funcionalidad no existe.
Resulta inadmisible que, a pesar de los avances tecnológicos y de haber instalado nuevos parquímetros, se siga obligando al usuario a introducir el importe exacto, siendo este un sistema poco equitativo, además de obsoleto. De no pagar el importe exacto rechaza la cantidad introducida, no dando, por tanto, la opción de devolución del dinero sobrante, como ya ocurre en cualquier establecimiento comercial que tiene instalado aparatos de pago con monedas.
Tampoco resulta comprensible que determinadas monedas, como las de uno y dos céntimos, no sean admitidas, más tratándose de un sistema público, dado que son monedas de curso legal, y, por tanto, deben ser reconocidas técnicamente por estos aparatos, como así lo son en otros de cualquier establecimiento comercial.
Igualmente, la organización viene reclamando una mejora de la información en los parquímetros, sobre cuestiones tan básicas sobre cómo proceder el usuario al trascurrir el tiempo máximo de aparcamiento, debiendo desplazar su vehículo a otra zona.
No obstante, cada máquina informa del número de zona en la que nos encontramos y sólo si se accede a la web “aparcamurcia.com” puede conocerse el plano de ubicación de las distintas zonas. Sin embargo este acceso se realiza a través de un código QR, herramienta que no es conocida por muchos ciudadanos, especialmente las personas mayores o con dificultades para el manejo de las nuevas tecnologías, además de que para ello es preciso disponer de un lector QR.
Asimismo, con la información disponible en los parquímetros, no queda clarificada la obligación del usuario a cambiar de zona.
Valoración de CONSUMUR a algunas de las modificaciones de la normativa
Clasificación de plazas como de Muy Alta Rotación, Alta Rotación y Baja Rotación
CONSUMUR desconoce todavía exactamente las calles y zonas concretas que se enmarcarán en las nuevas categorías. No obstante, muestra su absoluto rechazo a la limitación de 90 minutos improrrogables en la zona de Muy Alta Rotación, manteniendo en la zona de Alta Rotación el tiempo máximo de 150 minutos y dejando únicamente la zona de Baja Rotación, que se circunscribe a los barrios periféricos, para estacionamientos prolongados.
La organización entiende que la limitación máxima de 90 y 150 minutos, según la zona, sólo beneficiará a visitantes o conductores que se desplacen para la realización de gestiones puntuales, no siendo éste el perfil mayoritario de los conductores que hacen actualmente uso de la zona azul.
Igualmente, el tiempo establecido es muy reducido, por lo que impedirá un uso habitual a trabajadores, dada la necesidad de tener que cambiar el vehículo de zona transcurrido ese periodo. Hay que destacar que si bien es cierto que existe la zona verde, destinada precisamente a los trabajadores, ésta va a centrarse únicamente en la zona de Baja Rotación, al contrario de lo que viene reclamando la organización, que es precisamente la ampliación de este tipo de estacionamiento.
Personas con movilidad reducida
CONSUMUR no comparte el criterio de gratuidad y de ausencia de limitaciones temporales para el estacionamiento de los vehículos que transporten a personas que sean beneficiarias de la tarjeta de aparcamiento para personas con movilidad reducida, dado que considera que este colectivo ya cuenta con plazas reservadas.
Si la pretensión del ayuntamiento es ayudar a este colectivo para que no presenten mayores dificultades a la hora de desplazarse, objetivo que comparte la organización, una medida puede ser ampliar el número de plazas reservadas para el estacionamiento entre 1 y 2 en cada calle dependiendo del número de plazas totales que haya en las distintas modalidades.
No obstante, no se justifica la gratuidad del servicio ni la excepción de someterse a límites temporales para este colectivo en zonas azules, dado que el hecho de ser discapacitado no supone por ello una situación económica peor que cualquier otro ciudadano, por lo que si se quiere hacer una discriminación positiva, ya están para ello las zonas reservadas a discapacitados, que en todo caso deben mantenerse y estudiarse la necesidad de nuevas ubicaciones o ampliaciones, si fuera necesario.
CONSUMUR considera que en todo caso, lo que debe hacerse, es hacer un inventario de todas las calles y accesos públicos, así como de los autobuses urbanos e interurbanos de ámbito municipal, como la ratio de taxis para que estén plenamente adaptados a cualquier persona con movilidad reducida ya sea de modo permanente o temporal, con lo que la calidad de vida del ciudadano afectado sería tenida más en cuenta.
El presidente de CONSUMUR, Roberto Barceló Vivancos, considera que “estas medidas que se quieren habilitar, que se supone forman parte del nuevo plan de movilidad, no responden en su conjunto al desarrollo de una ciudad sostenible y, por tanto, menos contaminante, donde se quiere dar prioridad al peatón y a otros modelos de circulación más amables y respetuosos con el medio ambiente, ya que para ello debe prepararse primero la ciudad para cubrir todos los intereses de los sectores afectados”.
Roberto Barceló Vivancos se pregunta “si en esta nueva ordenación están incluidas aquellas pedanías con una población y ordenamiento urbano que permita también mejoras o adaptaciones para igualarse, a todos los niveles, con el resto de las personas residentes y también contribuir al cumplimiento de los objetivos derivados, parece ser, de estas medidas”.
Por otro lado, añade, que “no entiendo muy bien la falta de sensibilidad para consultar con las organizaciones representativas en su conjunto, no se comprende que solo hayan sido dos, parece ser, para cuestiones tan importantes como éstas, dado que un conocimiento global de todos los sectores, supondría una respuesta mucho más equilibrada en coherencia con la finalidad última que se pretende”.
“Si de verdad queremos mirar a Europa, como es uno de los argumentos que se esgrimen, hagámoslo también pero para que la democracia sea, igualmente, un signo de progreso y calidad, hagámoslo con plena participación de la ciudadanía”, termina.