La organización apuesta por el mantenimiento de un Consejo, cuya presidencia sea totalmente independiente de partidos políticos, sindicatos, organizaciones sociales o representativas en el ámbito económico – social de la Región de Murcia
La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red, CONSUMUR, muestra su preocupación por la propuesta de modificación de la Ley de Transparencia de 2014, que supone la sustitución del actual Consejo de la Transparencia por la figura unipersonal del Comisionado de Transparencia, designado por la Asamblea Regional entre los candidatos que propongan los grupos parlamentarios.
Para CONSUMUR esta reforma supondrá una pérdida de la capacidad de independencia de un órgano que tiene que estar por encima de cualquier Gobierno, y no a merced de intereses partidistas. Este cambio de modelo supondrá una pérdida de capacidad incluso para emitir resoluciones en contra de los intereses del partido que gobierne en cada momento.
La organización apuesta por mantener el modelo actual, aunque introduciendo cambios en el mismo. Es fundamental que la presidencia del Consejo de la Transparencia la ostente una persona ajena e independiente de partidos políticos, sindicatos, organizaciones sociales o representativas en el ámbito económico – social de la Región de Murcia, a finde dar plena garantía al ciudadano de que su dictamen es totalmente objetivo e independiente, siendo la esencia de la verdadera transparencia.
Es fundamental que en el Consejo esté representada la sociedad civil organizada, hecho que no se garantiza con la reforma que se pretende instaurar.
No obstante, CONSUMUR considera que para el adecuado funcionamiento de este órgano no es suficiente con mantener su estructura, sino que se le ha de dotar de medios que garanticen una rápida respuesta al ciudadano, en un tiempo razonable y no con demoras en la resolución de expedientes de entre 8 y 16 meses como viene sucediendo actualmente.
Roberto Barceló Vivancos, Presidente de CONSUMUR, considera que “La presidencia del Consejo de la Transparencia, ya no es que no deba responder en su elección al gobierno de cada momento, sino tampoco a la decisión de la Asamblea Regional y, por tanto, al juego de intereses partidistas que se originan.
Ha de arbitrarse una fórmula que garantice plenamente su elección de modo imparcial.
De igual modo, quien ostente la presidencia, ha de ser una persona ajena a cualquier vínculo orgánico, o, incluso yendo más allá, ni siquiera siendo afiliado de base (en ambos casos debiera desvincularse), de cualquier organización social, política, sindical, empresarial o de otra índole que pudiera generar una situación contradictoria con los fines que defiende, dado que, sin duda, ello podría contaminar su independencia por los posibles conflictos de intereses pudieran generarse, como sucede con la actual presidenta interina, Juana Pérez Martínez, que lo es al mismo tiempo y desde hace años, presidenta de una federación de amas de casa y consumidoras, podría dudarse de la capacidad de tomar, en un momento dado, decisiones basadas en la imparcialidad y objetividad de la responsabilidad intrínseca que su cargo lleva implícito.
¿Cómo resuelve una o 100 peticiones, que las hubiera contra la federación que preside o contra algunas de las asociaciones que la integran? Sin dudar de su honestidad, pero, tal vez por coherencia, debiera no querer asumir dicha responsabilidad.
¿No hubiera sido un gesto, precisamente de transparencia, haber aceptado dicho cargo en funciones, durante el menor tiempo posible y solo con la finalidad de llamar la atención en la urgencia de resolver la falta de una presidencia que cumpliera dichos requisitos y no permanecer, como de momento lleva más de año y medio en un cargo que llamémosle como le llamemos, pero ejerciendo todas las capacidades y funciones que el mismo conlleva? Es una cuestión de como cada uno hace observancia de los principios éticos.
¿Acaso es que este gobierno se ha sentido cómodo en esta situación y no ha tenido mucha prisa en dar un paso que, por lo que parece, va a resolver para asumir plenamente el control de dicho Consejo, quebrando plenamente la credibilidad del mismo?”
